División de propiedad de divorcio

Cuando se trata de la división de la propiedad del divorcio, usted tiene dos preocupaciones principales: primero, el matrimonio no matrimonial y segundo, el matrimonio. Hay propiedades y activos que no forman parte de la propiedad del divorcio. En esos casos, no tiene derecho a la propiedad de su socio.

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Propiedad no matrimonial

No marital se refiere a cualquier cosa que haya mantenido separada del matrimonio. Esto puede incluir una cuenta de ahorros separada, herencias, bienes raíces, etc. que poseía antes del matrimonio. Estos también tendrían que mantenerse separados durante todo el matrimonio. Básicamente, su propiedad no matrimonial seguirá siendo 100% suya después del divorcio. Estos no se incluirían en la división de sus activos totales.

Entonces, ¿qué hace que una propiedad no marital? Por ejemplo, tiene un ahorro de $ 20,000 antes del matrimonio. Si desea mantener esa propiedad no matrimonial, debe mantener el dinero en una cuenta separada, únicamente a su nombre. Tienes que salvaguardar eso manteniéndolo fuera del matrimonio. No ponga su cheque de pago en esa cuenta de ahorros. Los cheques de pago se consideran propiedad conyugal. Si aumenta sus $ 20,000 a través del cheque de pago, sus $ 20,000 pueden considerarse como matrimoniales y ya es un candidato para propiedad de divorcio.

La herencia y las donaciones se consideran no matrimoniales. Si obtiene una herencia dentro del matrimonio, el testamento puede redactarse para excluir específicamente a su cónyuge de dicha herencia. Los obsequios, ya sea antes o durante el matrimonio, siempre que sean entregados por un tercero, se consideran no matrimoniales.

Propiedad conyugal

La propiedad conyugal es todo lo que compró y adquirió dentro del matrimonio. Un negocio que inició, administró y financió con su propio dinero durante el matrimonio se considera marital. La casa con la que ambos pagan a través de sus cheques de pago también se incluye en esta categoría. Los automóviles que compró (incluso si están bajo su propio nombre) dentro del matrimonio se consideran matrimoniales. Todos ellos serán considerados propiedad de divorcio.

La pensión es un asunto completamente diferente. Principalmente no son matrimoniales. Sin embargo, también existen ciertos casos en los que la pensión se considera conyugal. Cuando eso suceda, su cónyuge tendrá derecho a una parte de eso.

Cuando la propiedad del divorcio es especialmente valiosa, un divorcio rápido puede ser simplemente imposible. Aquí es donde necesita la experiencia de un abogado de divorcios. Tienes que estar completamente equipado cuando luchas por mantener lo que es legítimamente tuyo durante la división de las propiedades del divorcio.

A pesar de que el divorcio es un tema muy delicado y, a veces, controvertido, G. Gibbons encuentra que la información sólida y correcta puede ser lo más importante que se debe recibir cuando se sufre un divorcio.